Sarita Colonia abre sus puertas al almuerzo
Desde hace dos semanas, Sarita Colonia- lugar de moda, que se autodefine de cocina peruana travesti – abrió sus puertas para recibir a sus comensales a la hora de almuerzo, con un menú especial o bien a la carta.
Más que un restaurante, Sarita Colonia es un verdadero museo en el que la demencia Kitsch y el maximalismo se expresan para contar diversas historias entrelazadas con lo religioso, la muerte, la vida, la amistad y la gastronomía. En el primer piso, por ejemplo, sobresale una lámpara del Teatro Municipal que se cayó durante el terremoto y que hoy alumbra este lugar adornada con cabezas de muñecas de guagua en su interior. En las pareces, cuadros de los héroes de la Guerra del Pacífico; en la terraza, nichos que prontamente serán sellados con pinturas de variados artistas.
La cocina que se sirve en este excéntrico restaurante es peruana travesti, es decir, una cocina vestida en otra cocina. Tanto por el ambiente como por su excelente gastronomía- a cargo del chef peruano Juan Andrés García– y su entretenida y variada coctelería, este restaurante es perfecto para disfrutar con los amigos, sobre todo para quienes buscan alternativas diferentes, fuera de lo común, que se transforman en experiencias memorables.
Para empezar la velada, recomendamos el Sarita B ( $6500), un cóctel inspirado en Sarita Vásquez y que lleva Gin Hendrick’s, Agua de Pepino, infusión de Huacatay, Miel de Sauco y Jugo de limón, servido en frasco de vidrio y adornado tiernamente con una flor. Original, fresquito, en el que sobresale el sabor a pepino y especial para estos calurosos y contradictorias días invernales.
A la hora de almuerzo, puedes elegir entre el menú ( $12.900) que lleva entrada, fondo y postre, o bien escoger un plato de la carta. En este caso, degustamos de entrada un suave y liviano Tabouleh de Quinua, con paltas asadas y mix de hojas verdes, para seguir con un Arroz Chaufan de pulpo en salsa nikkei y wantán crocante, rico y agridulce a la vez. De postre, el imperdible Suspiro a la limeña.
De la carta, en tanto, te recomendamos partir con los Ostiones a la parmesana – flambeadas en el momento- ideal para picotear entre varios, y seguir con los Gnocchi de Papa y Betarraga con Charqui de Salmón ($10.900) , marinado en eneldo y naranja, salsa de queso, mantequilla y crema. Un plato no solo rico, sino adictivo.
Horarios de almuerzo:
Jueves-viernes ( menú o a la carta) y sábado ( solo a la carta) de 13 a 15 horas
Domingos: de 13 a 16 horas ( solo a la carta)
Loreto 40, Recoleta, Región Metropolitana
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