Así se vivió la Fiesta de la Vendimia en Casablanca

El pasado sábado y en un rico día día otoñal pudimos vivir en primera persona la Fiesta de la Vendimia de Casablanca, el valle donde se producen los vinos blancos más importantes del país. Esto, gracias a la  cordial invitación de la  Asociación de Empresarios Vitivinícolas del Valle de Casablanca A.G

El epicentro de la fiesta fue la Plaza de Armas de Casablanca, lugar donde 14 viñas de la zona exhibieron sus mejores vinos, en su mayoría blancos. De hecho, la uva de Casablanca tiene el reconocimiento del Sello de Origen entregado por el Instituto Nacional de Propiedad Intelectual, y que pone al fruto al mismo nivel de reconocimiento que la langosta de Juan Fernández, el limón de pica o la Sal de Cahuil, por ejemplo, distinguiendo sus particularidades y resaltando su singularidad.

No obstante, otro de los protagonistas fue el pinot noir, muy de moda por estos días. Además, contó con una Barra de Espumantes y un espacio destinado a los Vinos Premium. Para degustar, podías comprar tablas de charcutería o brochetas de quesos que ofrecían los productores locales.

Para comer, imposible no dejarse tentar con el aroma envolvente del cordero al palo que aquí se estaba asando. Junto al de las sopaipillas con pebre, las empanadas, los anticuchos, el mote con huesillos, todos  sabores locales que le dieron identidad al evento.  También nos fuimos con paquetes de miel, cuchuflíes, quesos de cabra y algunas muestras de artesanía local que se exhibían en los 80 puestos preparados para la ocasión, entre ellos variados accesorios para los amantes del vino.

En el escenario principal, diferentes artistas amenizaron la tarde, junto a la elección de la Reina de la Vendimia y el tradicional pisoneo de uvas. Todo en un ambiente familiar, muy tranquilo y seguro.

También hubo espacio para el arte: en la ocasión, la artista visual alemana Ulrike Arnold y el fotógrafo estadounidense Victor van Keuren, inauguraron su exposición de fotos y pinturas “Casablanca: Viñas y Tierra” creadas durante la vendimia 2017.  La exposición consta de diversas fotografías de Viñas del Valle de Casablanca realizadas por  Victor van Keuren durante la Vendimia y de obras originales de Ulrike Arnold, la cual pintara con tierra de las Viñas de la zona, polvo de meteorito y vino de Casablanca. Si te la perdiste, lo bueno es que la exposición tendrá una duración de dos semanas y podrá ser visitada gratuitamente en la Casa del Visitante.

El broche de oro fue un almuerzo campestre en el restaurante Macerado de Casablanca, un cálido y rústico restaurante con una interesante propuesta de cocina chilena en la que se incorporan productos de la zona y deliciosas carnes preparadas con sello local. Aquí pudimos disfrutar de un rico cóctel en base a sopaipillas, empanadas de carne, tapas de pernil, arrollado de huaso, ente otras exquisiteces, seguido de un almuerzo bajo un parrón con un plato de carne mechada con puré rustico como protagonista. La tarde fue sellada con un perfecto turrón de vino. Y por supuesto, mucho pero mucho vino.

Una vendimia a la que definitivamente Hay que ir. ¡ Salud!

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